Collado Villalba sigue consolidándose como una de las localidades más conflictivas de la Comunidad de Madrid, ocupando un preocupante cuarto puesto en el ranking de municipios donde más crece la criminalidad. Según los datos del Ministerio del Interior correspondientes a 2024, la delincuencia en este municipio aumentó un 7%, una cifra que lo sitúa solo por detrás de Parla, San Martín de la Vega y empatado con Coslada. Mientras el resto del país celebra una reducción del 0,3% en los índices delictivos, Collado Villalba parece empeñada en llevarse la medalla de oro de la criminalidad.
Este no es un hecho aislado. En 2022, la localidad ya registró un alarmante incremento del 31,4% en delitos, y en el segundo trimestre de 2023 la cifra volvió a subir un 20,14%. Con estos números, Collado Villalba no solo se consolida como la capital de la delincuencia en la sierra noroeste, sino que también se aleja cada vez más de la tendencia positiva que disfrutan municipios vecinos como Torrelodones (-9%), Galapagar (-5,3%) o Las Rozas (-3%), todos ellos también gobernados por el PP, pero con una gestión a todas luces más efectiva.
Con una tasa de criminalidad que sigue disparándose y una sensación de inseguridad que crece entre los vecinos, Collado Villalba parece encaminarse a convertirse en un caso de estudio sobre cómo no gestionar la seguridad ciudadana. Mientras otros municipios avanzan, este rincón de la sierra madrileña sigue estancado en su lucha contra la delincuencia, con resultados que dejan mucho que desear.
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